Cómo pagar bonos de manera eficiente: el Banco de la Nación y su experiencia con la banca celular
Fuente imagen: ANDINA.
Está claro que urge proponer una estrategia para el pago de los bonos sociales de manera tal que – en el contexto de la pandemia COVID 19- se garantice la protección de la salud de las personas, asimismo, que contribuya a la mitigación de la caída de ingresos de las familias y de las microempresas.
Los antecedentes
El gobierno declaró la emergencia sanitaria a mediados de marzo de 2020 y dispuso una cuarentena inicial por 15 días, que luego se ha extendido a 70 días. Claramente la cuarentena iba a afectar a los ingresos de las familias, sobre todo a las del sector informal que en el Perú representan al 70% de la fuerza laboral.
Para compensar la caída de ingresos se dispuso la entrega de una transferencia monetaria de S/ 380 para 2.7 millones de familias pobres y pobres extremas y se le encargó al Ministerio de Inclusión y Desarrollo Social (MIDIS) la planificación y entrega de dicha transferencia.
Posteriormente se amplió la cobertura de esta transferencia a 800 mil trabajadores independientes no pobres con ingresos menores a S/ 1200.
Dado que la duración de la cuarentena se amplió más de lo esperado, se dispuso el otorgamiento de un segundo bono por un monto igual de S/ 380 para los 3.5 millones de beneficiarios del primer bono.
En adición a los dos bonos señalados, el gobierno decidió ampliar la cobertura al sector rural: 1.1 millones de familias, y luego propuso la creación de un Bono Universal para 6.8 millones de familias el mismo que engloba a todos los beneficiarios anteriores.
No es objeto de este artículo evaluar la calidad de los datos y sobre la actualización del padrón de beneficiarios.
El pago del primer Bono
Para la entrega de las transferencias monetarias el gobierno convocó a los principales bancos. Desde un inicio el Banco de la Nación (BN) fue el único banco que propuso el abono en cuenta de los beneficiarios que tuvieran cuenta y tarjeta de débito activa. Todos los demás Bancos decidieron que la única modalidad de pago fuera en ventanilla.
Como resultado de la propuesta del BN, se identificaron 500 mil clientes con cuenta y tarjeta de débito activa. Es necesario tener en cuenta que no bastaba tener una cuenta de ahorros, lo crucial era tener una tarjeta de débito activa porque ella permite el acceso a todos los canales del Banco (principalmente cajeros automáticos y agentes corresponsales).
Además, con la tarjeta se podía disponer del bono realizando compras en cualquier negocio afiliado a Visa. Igualmente, el BN dispuso que no cobraría comisiones por retiro en cajeros de otros Bancos[1], lo que permitía ampliar la red de puntos para el cash out.
Los resultados de la estrategia planteada por el BN fueron notables: en solo 2 días se dieron 72% de retiros en 6 días ya se habían realizado 99% de retiros. Pero lo más importante fue la desconcentración de los pagos en cajeros automáticos y agentes corresponsales en donde ocurrió el 83% de los retiros. Solo el 17% de los retiros ocurrieron en ventanilla. Parte importante del éxito de la modalidad adoptada fue la difusión clara, concreta y oportuna en medios de comunicación sobre las bondades del retiro del bono en canales alternos a las ventanillas.
Cuadro 1. Pagos por canal de atención del primer Bono MIDIS a clientes con cuentas en el BN
En adición a los 500 mil beneficiarios que cobraron en todos los canales del Banco, el MIDIS asignó 700 mil beneficiarios que, al no ser clientes del Banco, tuvieron que cobrar en las ventanillas del Banco.
El proceso de retiros en ventanilla fue más costoso en términos de tiempo y riesgo. Mientras que con los abonos en cuenta al segundo día se habían realizado el 72% de retiros, con el pago en ventanilla al segundo día habíamos alcanzado solo el 28% de retiros. Además, el pago en ventanilla obligaba a los beneficiarios a realizar largas colas desde la madrugada[2].
El pago del “Bono Independiente”
El aprendizaje de la primera experiencia no ofrecía dudas. La estrategia debía ser el uso de todos los canales del BN para el retiro de los bonos. Además, el BN había ganado una fortaleza en los últimos 2 años. Como parte de su objetivo de inclusión financiera, había aumentado el número de agentes corresponsales de 5,000 a 10,000 alcanzando una cobertura en 1,549 distritos del país[3].
El equipo de transformación digital del BN, un equipo de no más de 5 personas liderados por dos ingenieros de sistemas que en la década del 90, desarrolló el RUC y el sistema de recaudación bancaria de SUNAT e integrados con quienes desarrollaron la Banca Celular del Banco en el 2014, tenían la respuesta: utilizaríamos los aplicativos de Banca Celular para enrolar a millones de beneficiarios del Bono. Esta idea nos daba vueltas desde el pago del primer bono, pero el cuello de botella era como obtener masivamente los números de celular de manera confiable.
Sabíamos que OSIPTEL tiene la mejor base de datos de celulares, no obstante, estos correspondían no necesariamente a los usuarios sino a los compradores y, en un país informal como el nuestro, eso cuenta.
A continuación se contactó con RENIEC, esa institución tenía la respuesta: su aplicativo de validación de identidad.
Ya el proyecto listo, se le propuso al Ministerio de Trabajo, organismo que estaba a cargo del pago del “Bono Independiente”. Esta vez el BN propuso ir solo y sin la Banca privada. Se trataba de 800 mil beneficiarios y dado que se trataba de una innovación decidió probarla junto con el Ministerio de Trabajo (MINTRA) y RENIEC.
Hay que mencionar que no se contaba con muchas facilidades presupuestales, pero el proyecto avanzó. Planteamos al MEF que se utilizara la misma página web www.yomequedoencasa.pe, porque ya estaba posicionada pero hasta ahora desconozco los motivos por los que no se pudo concretar la propuesta y salimos con www.bonoindependiente.pe.
Dos fueron los obstáculos más difíciles de superar: el corto tiempo para desarrollar el proyecto y confirmar si los beneficiarios estaban preparados para validar sus identidades, registrar celulares en internet, recibir mensajes de texto con claves de acceso y generar claves de retiro para utilizar la opción sin tarjeta en agentes y cajeros.
EL BN tenía la confianza en que Banca Celular es un producto maduro del Banco de la Nación. Se la utiliza desde el año 2014, principalmente por maestros, médicos y policías en las zonas más alejadas del país en donde la señal de internet o no existe o es de baja calidad.
Para utilizar la Banca Celular no se necesita un Smartphone, basta un teléfono celular con tecnología 2G para transmisión de voz por el que se envían datos y voz[4].
Banca Celular tiene casi 2 millones de afiliados y durante el año 2019 se hicieron más de 11 millones de transacciones por 2,250 millones de soles, la mayor parte de ellas para transferencias de dinero entre clientes del BN, pero también para pagos de servicios públicos y retiros sin tarjeta. Por lo tanto, es la primera billetera electrónica del país, ligada a una cuenta bancaria, es verdad, pero al fin y al cabo es una billetera electrónica. Su principal limitación, como la mayor parte de billeteras electrónicas que están surgiendo, es que no es interoperable con otros bancos[5].
El producto que le propusimos al Ministerio de Trabajo fue sencillo y se describe en el siguiente diagrama:
Los resultados del proyecto fueron mejores a los esperados. La plataforma se lanzó el 8 de abril y el primer día se inscribieron 253,307 personas (36.2% de los beneficiarios[6]). Pero más importante fueron los canales a través de los cuales cobraron.
Cuadro 2. Pagos por canal de atención del Bono MINTRA a trabajadores independientes
Haciendo un corte al 27 de abril el BN pagó al 80% de beneficiarios del BONO INDEPENDIENTE. El 95% de dichos pagos se hicieron en canales distintos a la ventanilla. Con ello el BN logró diversificar los canales para el retiro de los bonos y reducir de manera importante las aglomeraciones.
Las lecciones aprendidas de los pagos de los dos primeros bonos
De estas dos experiencias dio como resultado las siguientes lecciones:
El pago del tercer y cuarto bono: los segundos S/ 380 para pobres, pobres extremos e independientes
El Banco de la Nación ya contaba con un producto exitoso, el cual con las mejoras que se pudo introducir permitiría pagar a cientos de miles de beneficiarios abriendo cuentas digitales en celulares[7].
La inversión realizada de registrar el celular de los 700 mil trabajadores independientes con el MINTRA simplificaba enormemente el trabajo para el segundo bono correspondiente a ellos pues solo era necesario enviarle los S/ 380 a sus celulares.
En el caso del MIDIS, el producto se había ganado su confianza y les propusimos hacernos cargo de los 500 mil clientes del Banco y de los 700 mil adicionales para el abono en celulares.
En el camino dialogamos con el Banco Mundial (BM) y difundimos nuestra experiencia. Una de las sugerencias del BM fue la interoperabilidad de cualquier billetera electrónica y la participación del mayor número de entidades del sistema financiero para el pago.
Si bien esto último es deseable, existe un trade off entre la participación del mayor número de entidades financieras y la simplicidad de los mecanismos de pago que se utilicen. La solución es un solo mecanismo de pago con todas las entidades financieras posibles. Esto requiere un mecanismo interoperable para todos los Bancos[8]. Como no existía tal mecanismo el MIDIS optó por utilizar varios mecanismos de pago para el pago de su segundo bono. Esto, aunque tuvo muy buenas intenciones, trajo mayor confusión entre los beneficiarios.
Sin evaluar adecuadamente los riesgos, aunque sin muchas opciones a la vista, el MIDIS desarrolló un sistema con varios mecanismos de pago. Esto ocasionó mayor confusión en los beneficiarios, quienes en la que la mayor parte de casos fueron a las agencias del Banco de la Nación a preguntar cómo funcionaba el aplicativo tal o cual o cómo eran las citas en el Banco tal o cual. Además, todavía existían decenas de miles de beneficiarios a los que no se les había pagado el primer bono y en la plataforma aparecía pago en proceso. Y muchos otros iban a las agencias a preguntar si eran beneficiarios del Bono Rural y del Bono Universal anunciados hace semanas por el gobierno pero sin fechas concretas de implementación.
Finalmente, el MIDIS le asignó al BN el pago de 1.9 millones de beneficiarios, es decir 700 mil más de los acordados. De estos, 1.4 millones corresponderían al mecanismo Banca Celular y 500 mil al mecanismo abono en cuenta.
No obstante, cuando finalmente se lanzó la nueva plataforma nos volvimos a sorprender positivamente con los resultados: en el primer día de lanzamiento, viernes 1 de mayo, se inscribieron 587,441 (40% de los asignados a Banca Celular). Además, con las mejoras introducidas en el módulo de validación de identidad de RENIEC, el 91% de los inscritos el primer día había realizado la validación con éxito. En los tres primeros días se inscribieron 996,298 personas (casi 70% de los asignados a Banca Celular).
Dada la velocidad de inscripción más allá de cualquier expectativa, el BN decidió segmentar los pagos por último dígito del DNI. El cronograma para el pago termina hoy martes 12 de mayo. En menos de dos semanas se ha pagado al 90% de beneficiarios y al 85% en canales distintos a las ventanillas del BN.
Una propuesta para el pago de los siguientes Bonos
Luego del aprendizaje y el desarrollo de experiencias exitosas implementadas por el BN, queda claro que lo que hay que corregir es la planificación para el pago de bonos y la armonización de los distintos mecanismos de pago. Para ello los objetivos deben definirse con claridad: a) Difusión oportuna de mecanismos y fechas concretas; b) Pago sencillo y rápido. Para ello utilizar un solo mecanismo o a lo más dos; c) Evitar aglomeraciones. Para ello utilizar a la mayor parte de la red del sistema financiero.
Dado que el BN ya tiene 2.1 millones de celulares registrados no se puede desaprovechar esta inversión. El mecanismo de Banca Celular es el que se ha probado más exitoso. Este mecanismo, más el abono en cuenta para los que ya son clientes de algún Banco, deben ser los dos únicos mecanismos a utilizarse.
Para asegurar la interoperabilidad, la red de agentes corresponsales y de cajeros automáticos de toda la Banca debe integrarse con Banca Celular del Banco de la Nación. Este es un problema tecnológico de solución sencilla si se cuenta con la participación de los principales bancos del país.
Además, incorporar a toda la red de agentes de toda la Banca va a ayudar a decenas de miles de microempresas a mejorar sus ingresos por las comisiones establecidas en los contratos que ya se tienen celebrados con los agentes, y algo mucho más importante: los beneficiarios de los bonos podrán voluntariamente comprar productos a las bodegas, farmacias y tiendas de abarrotes en general. Con esto se colabora en la desconcentración de mercados y en generar ingresos para decenas de miles de microempresas.
Sí es posible.
[1] La tecnología para que un cliente del Banco A pueda retirar en cajeros del Banco B está disponible desde hace muchos años. Sin embargo, existen comisiones elevadas para retiro en cajeros de otros Bancos. El sistema de comisiones está diseñado para que sea el Banco emisor de la tarjeta el que cobra la comisión.
[2] El BN dispuso un horario especial de atención desde las 7:30 am. En su momento propusimos que no solo se asignara día para cobrar el bono sino también hora. La asignación de día y hora funcionó muy bien cuando se cambió la Libreta Tributaria por el RUC en SUNAT y también en empadronamientos de predios en el Cercado de Lima.
[3] El BN debería seguir creciendo en agentes corresponsales. En Chile, con menos población, El Banco Estado tiene 20,000 Cajas Vecinas.
[4] Banca Celular utiliza tecnología USSD (Unstructure Supplementary Service Data)
[5] Ciertamente no por razones tecnológicas.
[6] Los beneficiarios del Bono Independiente por esta modalidad fueron 700 mill. A los otros 100 mil se les abonó directamente en sus cuentas de ahorro).
[7] Ciertamente, cuentas temporales que podían utilizarse solo para el pago y retiro de Bonos porque así lo establecía el marco legal aprobado por el gobierno.
[8] BIM, la billetera electrónica del Modelo Perú intentó hace algunos años ser interoperable pero no logró los resultados esperados.