Lima: La agenda para los últimos 7 meses de gestión
Luego del fallo en segunda y última instancia del Jurado Nacional de Elecciones (JNE), que declaró la vacancia del alcalde de Lima, Jorge Muñoz Wells, por haber recibido dietas entre marzo y mayo de 2019 al integrar el directorio del Servicio de Agua Potable y Alcantarillado de Lima (Sedapal), a la vez que percibía su sueldo como burgomaestre; su Teniente Alcalde, el Sr. Miguel Romero Sotelo asumirá las riendas de la Municipalidad Metropolitana de Lima en los meses que le quedan a esta gestión.
No deberíamos esperar grandes anuncios ni cambios, pues ambos son parte del mismo equipo, y estamos a poco más de 7 meses de la finalización de su mandato. Lo que sí debiéramos esperar, y exigir, es que los programas, proyectos y obras que se vienen desarrollando continúen con la misma fuerza, y que incluso se fortalezcan y aceleren para culminarse antes del cierre del año. Asimismo, sería muy importante que se revise la estrategia de comunicación, conectando los diversos esfuerzos que se vienen desarrollando bajo una visión integral; y comunicándolos a las y los vecinos para que éstos no sólo estén al tanto de lo que se ha avanzado en estos 4 años, sino que los valoren, defiendan y exijan su continuidad.
En ese sentido, el hecho que el Sr. Romero sea arquitecto, y esté especializado en urbanismo, no debiera ser un dato menor, pues esa visión proyectual y de planificación es la que se estaría necesitando para poder fortalecer los programas, culminar las obras y proyectos que se vienen ejecutando.
De todo ello, quizás lo que menos debería preocuparnos es la continuidad de las obras, pues tienen contratos que se vienen ejecutando. Allí lo que se debiera garantizar es que los contratistas puedan continuar con sus compromisos, y buscar mejorar su desempeño atendiendo sus sugerencias.
Donde sí se debe actuar de forma decidida es en la planificación urbana. Jorge Muñoz ha sido el alcalde que más ha invertido en planificación en lo que va del siglo XXI, con el apoyo del Ministerio de Vivienda. Se ha elaborado el Plan de Desarrollo Metropolitano al 2040, los Planes de Desarrollo Urbano por las Áreas Interdistritales (las llamadas “Limas”), el Plan Maestro del Centro Histórico de Lima y de la Costa Verde, y la actualización de la ordenanza de planificación urbana territorial. Salvo el Plan Maestro del Centro Histórico, el resto aún no han sido aprobados. El alcalde Romero tiene el deber de fortalecer el trabajo del Instituto Metropolitano de Planificación, y de dialogar con el Concejo Metropolitano de Lima para que estos instrumentos sean revisados y aprobados antes de la finalización de la presente gestión. Con la aprobación del Plan de Desarrollo Metropolitano, Lima tendrá después de 33 años un plan aprobado, el mismo que debiera servir de guía para el armado de los planes de gobierno de los diversos candidatos a la alcandía. Este instrumento no sólo sirve para ordenar el desarrollo integral de la ciudad, sino que incorpora una cartera de proyectos estratégicos y prioritarios que debieran acelerar las transformaciones positivas que el plan persigue, para hacer de Lima una ciudad más humana, justa y sostenible.
Este trabajo debe hacerse con absoluta transparencia, calmando las justificadas preocupaciones de especialistas e instituciones sobre las conexiones del Sr. Romero y su familia con diversas empresas constructoras e inmobiliarias.
Otro proyecto importante que Jorge Muñoz ha priorizado es la recuperación del Centro Histórico de Lima. La aprobación del Plan Maestro a finales del 2019 ha permitido fortalecer el accionar de Prolima (Programa Municipal para la Recuperación del Centro Histórico), reforzando y ampliando sus equipos técnicos, y permitiéndole gestionar recursos para intervenir en diferentes espacios públicos y edificaciones patrimoniales; desde el barrio de Monserrate hasta Barrios Altos. Durante la pandemia se ha avanzado decididamente con la peatonalización del damero, y ello ha aportado valor al conjunto monumental. El Sr. Romero debe fortalecer ese trabajo, apoyando a la institución para que las obras en curso se terminen, y se deje comprometida la continuidad del personal y de las obras en el 2023.
Asimismo, se debiera fortalecer la atención a los diversos barrios del distrito del Cercado de Lima, sobre todo en las zonas más vulnerables. La gestión de Jorge Muñoz ha sido una de las pocas que se ha preocupado de atender a sus vecinos directos, más allá del Centro Histórico, implementando una serie de proyectos de mejoramiento y equipamiento de vías locales y parques. Algunos están todavía en fases de preliminares de urbanismo táctico, y debieran, al menos, culminar el año con expedientes de obra aprobados, y recursos comprometidos para el 2023.
“Lima Te Cuida” es una estrategia territorial para asistir a las personas más vulnerables de la ciudad durante la pandemia de la Covid-19. Si bien la pandemia se viene disipando, la pobreza y pobreza extrema en la ciudad se ha incrementado de forma preocupante. ¿Qué rol asumirá la MML para poder asistir a sus vecinos más vulnerables? Esa pregunta debería hacérsela el alcalde Romero, y diseñar la evolución de estas estrategias en programas sociales.
Para cerrar el presente artículo, considero importante mencionar la importancia de fortalecer la relación y el trabajo conjunto con la Autoridad del Transporte Urbano de Lima y el Callao, combinando esfuerzos y respaldando su accionar, con miras a avanzar en el ordenamiento del transporte público de la ciudad. Las disputas entre ambas instituciones sólo perjudican a las y los ciudadanos, quienes ponemos en riesgo nuestras vidas, y perdemos años en medio de la congestión, y producto de la contaminación.
